

Nosotros
La corporación Lautraru nace al alero del sueño de la Sra. Ema Escajadio García, la cual busca entregar oportunidades educativas de calidad, a los niños/as y jovenes de la comuna de La Pintana. Es así que en conjunto con su hijo Miguel Vargas Escajadio, conforman una alianza familiar, que se traduce en la conformación de un establecimiento educacional, ubicado en la calle Miguel Ángel de la misma comuna.
Es así como el año 1986, abre sus puertas a la comunidad, la escuela Lautraru en la modalidad de educación especial en discapacidad intelectual, comenzando con una matrícula de 18 estudiantes.
La escuela posee una trayectoria de 38 años de funcionamiento, ampliando progresivamente conforme pasan los años, su infraestructura para dar acogida a estudiantes de todos los niveles, así como también, asumir el desafío de incorporar a estudiantes con trastorno específico del lenguaje.
En la actualidad, la escuela posee una matrícula de aproximadamente 460 estudiantes, reflejo de la confianza que nos han entregado todos nuestros padres y apoderados y el compromiso asumido con la comunidad, lo que ha significado un reconocimiento en la comuna y sus alrededores.
Es así que buscando dar respuestas educativas de calidad, Don Miguel Vargas, asume el desafío de abrir un establecimiento educacional en la comuna de Linares, región del Maule. El año 2003 abre sus puertas a la comunidad la escuela especial Hierbas Buenas, la cual acoge a estudiantes con discapacidad intelectual.
El establecimiento inicia sus actividades con una matrícula de 85 estudiantes, la cual se ha mantenido a lo largo de los años. Atiende a estudiantes provenientes de sectores mayoritariamente rurales, los cuales presentaban dificultades de desplazamiento para poder incorporarse a la educación. Es por ello que, se asume el compromiso de disponer de servicio de transporte escolar para toda la comunidad educativa.


La escuela mantiene plantel docente especializado para la atención de los estudiantes y funciona en la modalidad de jornada escolar completa.
Continuando con el desafío que significa consolidar la corporación como una entidad que presta servicios educativos de calidad a comunidades de contextos vulnerables, es que en el año 2017 Don Miguel Vargas Escajadio, en alianza con su hijo Miguel Vargas Valenzuela, abren las puertas de la escuela especial Lautraru II, Padre Hurtado, de la comuna de San Bernardo.
La escuela desde sus inicios atiende a estudiantes con discapacidad intelectual, así como también, con trastorno específico del lenguaje, abarcando una gran población de niños/as y jóvenes de la misma comuna, que presentan necesidades educativas especiales.
En la actualidad, cuenta con una matrícula de alrededor de 260 estudiantes, con proyecciones de ampliar su capacidad en los venideros años.
La trayectoria corporativa, sumado a la gestión de su equipo profesional, han hecho que la escuela se consolide en su corta trayectoria, reflejando compromiso y acogida en la comuna de san Bernardo.